Salió al tercer round decidido a cambiar el curso de la pelea Varón, y parecía que el italiano se veía sorprendido por la tozudez del español en ganar el centro del ring. Obligó a Fiordigiglio a boxear retrocediendo, y no se mostraba el italiano demasiado acostumbrado o especialmente hábil en la labor. Por un momento, dio la sensación de que Varón había encontrado su distancia y podía complicarle la pelea al italiano, pero los siguientes rounds resultaron igualados, quizás ganándolos Fiordigiglio por su insistencia en los últimos segundos de cada asalto, en los que aprovechaba para llevar la iniciativa, sorprendiendo en sus combinaciones al púgil español.
Y así se llegó al séptimo round, en donde después de una dura combinación, Rubén Varón se encontró contra las cuerdas, no parecía lastimado e incluso se le pudo ver citando a su rival, retándolo a pegarse en la corta. Pero en un segundo, el español se vió sorprendido por un tremendo upper de derecha que le abrió la guardia para un gancho de izquierda que lo enterró entre el ensogado, acabando del lado exterior a las cuerdas. Aturdido, el madrileño intentó luchar contra una cuenta que aunque a duras penas batió, no lo hizo en las condiciones necesarias según el árbitro de la contienda.
Dura derrota para el madrileño, que tendrá que valorar las opciones que le ofrece el deporte en el futuro próximo. Seguro que en una división en alza como la de las 154 lb. no faltarán jóvenes que quieran un nombre de relumbrón en su carrera a costa de Varón, que tendrá que valorar si le interesa tomar ese camino, tan distinto al de los titulos y los laureles. Por otro lado, el italiano Fiordigiglio se postula con firmeza para el cinturón de la EBU, en posesión en estos momentos de Sergey Rabchenko. Parece una pelea interesante a nivel europeo, y sólo queda esperar a que muevan pieza los italianos.